El refrán popular dice «Al hombre se le conquista por el estómago». Yo añadiría «a la mujer se la conquista en la cocina».
En los tiempos actuales, está demostrado que a las mujeres les encanta que sus parejas sean cocinillas. Porque cocinar es un acto de amor. Porque si sabe cocinar también sabe hacer las tareas de la casa (o al menos se defiende). Porque ninguna pelea dura mucho si prepara una cena romántica. Porque un hombre que disfruta cocinando también sabe disfrutar de los pequeños placeres de la vida. Así que ya sabes, si quieres convertirte en un buen partido tienes que aprender a cocinar.
Conviértete en un GUERRERO y cocina para conquistar a tu GUERRERA.