Justo el día en que la diosa Fortuna se toma unas necesarias y merecidas vacaciones, un novato en África, experto en 'vender castillos en el aire', es capaz de convencer a su mejor amigo, al sobrino de éste y a cuatro desconocidos y experimentados viajeros para que inicien junto a él un largo viaje en busca de lo que queda de un árbol que en su día fue famoso en el lejano desierto del Teneré.