Un ratoncito encuentra algo y lo esconde bien escondido. Cuando la ardilla, la tortuga, el erizo o la ranita le preguntan qué es lo que ha escondido, el ratoncito responde:«Es mi secreto, no lo diré jamás». Sólo que hasta los secretos mejor guardados crecen demasiado y al final se descubren.
En Textos Babel S.L. utilizamos cookies propias y de terceros que permiten al usuario la navegación a través de una página web (técnicas), para el seguimiento y análisis estadístico del comportamiento de los usuarios (analíticas), que permiten la gestión de los espacios publicitarios que, en su caso, el editor haya incluido en una página (publicitarias) y cookies que almacenan información del comportamiento de los usuarios obtenida a través de la observación continuada de sus hábitos de navegación. Si acepta este aviso consideraremos que acepta su uso. Puede obtener más información en nuestra Política de cookies, o cambiar la configuración.