En un juego de ironías, sátiras, críticas y metáforas políticas, el autor recurre a cuarenta situaciones, personajes, términos o escenarios propios de la novela 1984, que una vez aislados y analizados, se someten a comparación con otras tantas situaciones, personajes, términos o escenarios de nuestra España del siglo XXI. Aunque resulte inverosímil, las analogías entre la ficción de la novela de Orwell con la realidad de nuestra sociedad, son abundantes y en demasiadas ocasiones, nada recomendables para una democracia saludable.
En un juego de ironías, sátiras, críticas y metáforas políticas, el autor recurre a cuarenta situaciones, personajes, términos o escenarios propios de la novela 1984, que una vez aislados y analizados, se someten a comparación con otras tantas situaciones, personajes, términos o escenarios de nuestra España del siglo XXI.
Aunque resulte inverosímil, las analogías entre la ficción de la novela de Orwell con la realidad de nuestra sociedad, son abundantes y en demasiadas ocasiones, nada recomendables para una democracia saludable.