Un joven crítico y editor fascinado con la obra del difunto poeta Jeffrey Aspern se entera de que Juliana Bordereau, una de sus musas, vive aún, anciana y aislada, en un palazzo veneciano. Convencido de que conserva cartas y material inédito del poeta, se acerca a ella camuflando sus intenciones y consigue que lo acepte como inquilino. El joven se introduce entonces en un mundo agónico y fantasmagórico, volcado exclusivamente en el recuerdo, que la orgullosa anciana habita con la única compañía de una sobrina suya, una mujer ya madura que no parece haber conocido otra cosa que la reclusión y el legado de un esplendor desaparecido: ½Vivimos en un silencio aterrador dice. No sé cómo pasan los días. No tenemos vida.+ La presencia del joven trae un poco de ½vida+ a su relegada existencia, aunque el descubrimiento de que las razones de éste no son desinteresadas ni inocentes dé un turbio e inesperado vuelco a la situación. La idolatración del pasado y la necesidad de protegerlo envuelven a los personajes en una trama maestra de ambigüedades y bajezas, en la que el romanticismo y el materialismo se funden en una relación misteriosamente dialéctica. Los papeles de Aspern (1888) es, junto con Otra vuelta de tuerca, quizá la nouvelle más famosa y emblemática de Henry James.
"En Los papeles de Aspern están todas las virtudes de Henry James: su sentido de la comedia sutil, la crueldad con que hurga en nuestros defectos y mete el dedo en nuestras llagas, la elegancia invulnerable de su prosa y esa misteriosa habilidad para convertir la vida intelectual en una forma de la aventura. Este centenar de páginas ha dejado su huella en escritores tan dispares como Philip Roth y Javier Marías. Si alguien me preguntara por dónde hay que comenzar a leer a James, le pondría esta novela en las manos con la seguridad de estar creando una adicción." JUAN GABRIEL VÁSQUEZ.
"Henry James y Joseph Conrad, en el cambio del siglo XIX al XX, recogieron la tradición cervantina, la destilaron, la hicieron todavía más sofisticada. En sus ambiguos narradores, en el educado vértigo de sus tramas, en esos fascinantes artefactos -vueltas de tuerca de vueltas de tuerca- están los cimientos de la literatura más desafiante del siglo XXI". JORGE CARRIÓN
"Con escribir Los papeles de Aspern bastó para que James concibiera y ejecutara una de las novelas más hermosas y refinadas de la literatura del siglo XX". WILLIAM OSPINA