Zygmunt Bauman, uno de los sociólogos más respetados de nuestra época, nos ofrece un análisis de la sociedad contemporánea que pasará a formar parte de nuestra forma de interpretar el mundo. Lejos de complejidades académicas, Bauman expone con su proverbial claridad los problemas a los que todos nos enfrentamos y que no siempre sabemos cómo abordar. En esta ocasión, Bauman nos ofrece lo que él denomina «un informe desde el campo de batalla», un paso más de la lucha por encontrar formas nuevas y adecuadas de pensar el mundo en que vivimos. En vez de buscar soluciones a los problemas, quizá insolubles, del mundo moderno, Bauman nos propone cambiar nuestra manera de afrontarlos, ya que las creencias heredadas con las que contemplamos el mundo se convierten en un obstáculo que nos impide comprenderlo. Con su prosa ingeniosa y provocativa, Bauman nos propone abandonar un modo de pensar que nos deja indefensos ante la maquinaria de nuestros propios gobiernos nacionales y las amenazas de desconocidas fuerzas externas, invitándonos a repensar este mundo moderno, flexible y desafiante a la vez. Y es que, como él mismo escribe, citando a Václav Havel, «la esperanza no es un pronóstico», sino un arma que, junto con el coraje y la voluntad, deberíamos aprender a utilizar.
Zygmunt Bauman, uno de los sociólogos más respetados de nuestra época, nos ofrece un análisis de la sociedad contemporánea que pasará a formar parte de nuestra forma de interpretar el mundo.
Lejos de complejidades académicas, Bauman expone con su proverbial claridad los problemas a los que todos nos enfrentamos y que no siempre sabemos cómo abordar. En esta ocasión, Bauman nos ofrece lo que él denomina «un informe desde el campo de batalla», un paso más de la lucha por encontrar formas nuevas y adecuadas de pensar el mundo en que vivimos. En vez de buscar soluciones a los problemas, quizá insolubles, del mundo moderno, Bauman nos propone cambiar nuestra manera de afrontarlos, ya que las creencias heredadas con las que contemplamos el mundo se convierten en un obstáculo que nos impide comprenderlo.
Con su prosa ingeniosa y provocativa, Bauman nos propone abandonar un modo de pensar que nos deja indefensos ante la maquinaria de nuestros propios gobiernos nacionales y las amenazas de desconocidas fuerzas externas, invitándonos a repensar este mundo moderno, flexible y desafiante a la vez.
Y es que, como él mismo escribe, citando a Václav Havel, «la esperanza no es un pronóstico», sino un arma que, junto con el coraje y la voluntad, deberíamos aprender a utilizar.