Jaime Tarracó Planas fue capellán militar en la Campaña del Este durante la Segunda Guerra Mundial. Estuvo destinado en la I/262 con la División 250 alemana popularmente conocida como División Azul desde agosto de 1942 hasta noviembre de 1943. En su diario se mezclan las reflexiones filosóficas con las experiencias de combate ya que el páter Tarracó unía a una exigente autoconciencia moral y religiosa una vocación por estar cerca de sus soldados más amenazados: los soldados de primera línea. Esta proximidad al frente le valió la concesión de la Cruz de Hierro de 2ª clase junto con el distintivo de asalto de infantería, caso único entre el personal no combatiente de la División Azul. Carlos Caballero introduce el texto con un escrito sobre las actividades y funciones del vicariato castrense en campaña; Pablo Sagarra nos introduce en la biografía del padre Tarracó en la que la represión republicana sobre su familia y valores tuvo gran relevencia. Asismimo se recupera un texto de su hermano fray Luis Tarracó, de la Orden Cisterciense, para la prevista edición de sus memorias en 1993. Anexos, índice on