Nunca es tarde para ser feliz. Nunca somos demasiado viejos como para no poder vivir con alegría la madurez, esa etapa que muchas veces se tiñe de sentimientos negativos e ideas tristes, pero que bien planteada puede convertirse en un momento dulce y hasta placentero. El doctor Alfonso J. Cruz Jentoft, con más de diecisiete años de experiencia clínica y contacto directo diario con pacientes mayores desde las Unidades de Geriatría del Hospital Ramón y Cajal y de la Clínica Ruber, nos ofrece pautas de todo tipo para alejar las molestias de la vejez y asumir sus aspectos positivos.