½El ser humano es producto de la perfecciónáy la genialidad. Lo que parece fracasoáno es tal y su imperfección está perfectamenteádiseñada : todo está bien, todoásirve, aunque todo no sea bueno. Cualquierácircunstancia puede convertirse enáuna ayuda para lograr lo que deseamos y,si elegimos bien, ser muy felices.Podemos reconocer mejor nuestra propiaásituación y, apoyándonos en lo queárealmente somos, diseñar adecuadamenteánuestro proyecto hacia el verdadero éxitoáde vivir.Desde que escribí el libro Todos los niñosápueden ser Einstein, quise publicaráesta obra para que las personas adultasápuedan saber cómo encontrar esos pasosáposibles y asequibles, al alcance deátodos, para conseguir que nuestra vidaásea más eficaz, fructífera y feliz.+ (FernandoáAlberca)
«El ser humano es producto de la perfección y la genialidad. Lo que parece fracaso no es tal y su imperfección está perfectamente diseñada: todo está bien, todo sirve, aunque todo no sea bueno. Cualquier circunstancia puede convertirse en una ayuda para lograr lo que deseamos y,
si elegimos bien, ser muy felices.
Podemos reconocer mejor nuestra propia situación y, apoyándonos en lo que realmente somos, diseñar adecuadamente nuestro proyecto hacia el verdadero éxito de vivir.
Desde que escribí el libro Todos los niños pueden ser Einstein, quise publicar esta obra para que las personas adultas puedan saber cómo encontrar esos pasos posibles y asequibles, al alcance de todos, para conseguir que nuestra vida sea más eficaz, fructífera y feliz.» (Fernando Alberca)